Ibarburu
Linaje guipuzcoano, con casas solares en la parroquia de San Esteban, del valle de Oyarzun; en las villas de Guetaria y Usúrbil y en la ciudad de San Sebastián. Otra casa solar radicó en Ezpeleta (Labourd-Francia).
Probaron su hidalguía ante las Juntas Generales de Guipúzcoa y sus Justicias ordinarias: Bah de Ibarburu y hermanos, vecinos de Rentería, en 1717; Agustín de Ibarburu, vecino k Irún. en 1720; Manuel de Ibarburu, vecino de San Sebastián, en 1751; Santiago y Juan Agustín de Ibarburu, vecinos de San Sebastián, en 1764; Andrés, Lorenzo y Domingo de Ibarburu y María Ana de Galdona, mujer del tercero, vecinos de Motrico, en 1661; Lorenzo de Ibarburu y hermanos, vecinos de Motrico, en 1665, y María Antonia de Ibarburu, vecina de Irún, en 1794.
José Tadeo de Ibarburu y Osorio, natural de Sevilla, fue Caballero de la Orden de San Juan de Jerusalén, en la que ingresó en 1739.
Armas
La casa de la parroquia de San Esteban, de valle de Oyarzun: En campo de oro, un puente de tres ojos, de piedra, sumado de un castillo de lo mismo, de cuya torre del homenaje sale una bandera de gules, cargada de una cruz llana, de plata. Debajo del puente, ondas de agua de azur y plata.
Francisco Gómez Arévalo de Villafufre, Jorge de Montemayor y Juan Carlos de Guerra señalan que es una torre en vez de un castillo y que esta aclarada de azur.
En el expediente de pruebas de nobleza del Caballero de Calatrava Luis Lorenzo de Ibarburu y Armenta, se dice que en la casa principal que este caballero tenía en Sevilla, parroquia del Sagrario, y entre las calles del Aire y de la Soledad, casa propia del mayorazgo de Ibarburu, se veía su escudo de armas sobre el balcón principal. Dicho escudo era cuartelado, por alianzas: 1º, las armas de Ibarburu que dejamos descritas; 2º, de plata, con dos lobos de su color, puestos en abismo y acompañados de dos árboles de sinople, uno arriba y otro abajo; 3º, con un roble y debajo ondas de agua con un pato, y 4º, de gules, con cinco veneras de oro, puestas en sotuer.


